VERSÍCULO PARA MEMORIZAR:
“Entiende bien que eres un pueblo terco, y que tu justicia y tu rectitud no tienen nada que ver con que el Señor tu Dios te dé en posesión esta buena tierra” (Ver. 6).
COMENTARIO HISTÓRICO DE DEUTERONOMIO 9.
En este capítulo, Moisés hace una recapitulación de los actos de desobediencia y rebeldía que incurrieron los israelitas durante los cuarenta años de peregrinaje:
1) En el monte Sinaí, donde Dios se había manifestado en forma visible, cometieron idolatría al construir y adorar el becerro de oro;
2) Se desanimaron y tuvieron temor de ver a personas de estatura gigantes;
3) Creyeron que Dios no tenía poder para derribar a las ciudades amuralladas;
4) En Cades-barnea se quejaron contra Dios, porque creyeron que era imposible conquistar Canaán, y cuando Dios les ordenó que retornaran hacia el desierto, se rebelaron y quisieron conquista la tierra sin su compañía.
Estos actos de desconfianza en el poder de Dios, los condujo a postergar la entrada a la tierra prometida. Te invito para que hoy expresemos nuestra gratitud a Dios porque a pesar de alejarnos de su presencia, su justicia nos cubre de la condenación del pecado y nos otorga los méritos de Cristo en la cruz, para darnos una nueva vida.
CITA SELECTA.
“Muchos desean la vida, pero siguen andando en el camino ancho. Escogen rebelarse contra el gobierno de Dios, no obstante, la gran misericordia y compasión que él manifestó al dar a su Hijo para que muriese por ellos. Los que no escogen aceptar la salvación comprada a precio tan alto, deben ser castigados… Pero él los destruirá por completo para que sean como si nunca hubiesen existido; entonces su justicia estará satisfecha. Formó al hombre con el polvo de la tierra, y los desobedientes y profanos serán consumidos por fuego y volverán a ser polvo. Vi que la benevolencia y la compasión de Dios en este asunto debieran inducir a todos a admirar su carácter y a adorar su santo nombre. Después que los impíos hayan sido raídos de la tierra, toda la hueste celestial dirá: “¡Amén!” (PE 221).
DESAFÍO PARA HOY:
Analicemos las veces que nos hemos rebelado contra la voluntad divina y hemos hecho nuestro capricho. Reconozcamos que lo que somos y poseemos es por la misericordia y bondad de Dios.
OREMOS:
PADRE ETERNO, TE PEDIMOS PERDÓN PORQUE HEMOS ACTUADO DE MANERA AUTO SUFICIENTE, TE PEDIMOS QUE LA JUSTICIA DE TU HIJO CUBRA NUESTROS DE PECADOS, Y QUE NOS HAGAS IDÓNEOS PARA LA ETERNIDAD. POR JESÚS, AMÉN.